EL APOSENTO ALTO
Martes, 16 de febrero de 2010
Por eso, anímense y fortalézcanse unos a otros, tal como ya lo están haciendo. ¡Gracias!
Léase 1ª a los Corintios 12.4-11
-– 1ª a los Tesalonicenses 5.11 (VPEE)A principio parecía ser sólo otra oferta para suscribirse a una revista, en un sobre blanco regular. Sin embargo, cuando abrí el sobre hallé una sorpresa.
«Usted ha hecho historia», comenzaba la nota de un hombre que buscaba las direcciones correctas de los suscriptores cuyas revistas habían sido devueltas a la casa publicadora. Continuó diciendo que nunca antes había recibido una carta de agradecimiento de alguien a quien él había localizado. Me estaba enviando una nota agradeciendo la carta que yo le había enviado como una expresión de aprecio por su esfuerzo en hacerme llegar las revistas a la dirección correcta.
Cada uno de nosotros tiene diferentes dones que podemos usar para servir. Es fácil olvidar lo valioso que es dar las «gracias» a personas que han usado sus dones y destrezas para ayudarnos. Hasta nos olvidamos de darle gracias a Dios.
El expresar gracias por la vida que Dios me ha dado me alimenta el alma. El ofrecer una oración de gratitud me conecta con Áquel que ha creado esta tierra llena de belleza. Dios y su pueblo me ayudan cada día.
Sr. Allan Baker (Ontario, Canadá)
Oración:
Gracias Dios, por la vida que nos das. Ayúdanos a darle gracias a otros por la bondad que nos muestran. Amén.
Haga historia: exprese su agradecimiento.OREMOS:
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