Confiar en Dios

EL APOSENTO ALTO

Domingo, 24 de octubre de 2010
Confiar en Dios

Léase Mateo 6.25-34

Más bien, busquen primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas les serán añadidas.

-Mateo 6.33 (NVI)

AYER me levanté temprano y tomé el transbordador en la mañana para cruzar el canal. El día estaba soleado, e iba disfrutando el paisaje marino. El viaje en el barco era tranquilo.

En silencio comencé a orar, dándole gracias a Dios por las muchas bendiciones en mi vida: mi esposa, mi familia, mi trabajo y un bebé en camino. Al poco tiempo, mis pensamientos se tornaron en preocupación: ¿Qué ocurrirá si la economía continúa empeorando y pierdo mi trabajo? ¿Qué sucederá si el bebé no es saludable? En lugar de alabar a Dios, comencé a buscar confirmación, a pedir seguridad.

En ese momento, se escuchó la voz del capitán en los altavoces. Anunció que la neblina estaba muy densa, pero que llegaríamos a tiempo. Pensé en la tripulación que estaba confiando en los instrumentos del barco para navegar.

En Mateo 6.25-34, Jesús nos anima a entregarle a Dios la navegación de nuestras vidas. La incertidumbre sobre lo que está por delante puede ser una fuente de ansiedad. Pero Cristo nos asegura que podemos hallar paz al confiar en Dios. Concluí mi oración con alabanza.

Sr. Erik Tingelstad (Washington, EUA)

Oración:

Dios de toda época y de todo lugar, enséñanos a confiar en que recibiremos de ti todo lo que necesitamos. Amén.

PENSAMIENTO PARA EL DÍA Entréguele a Dios sus preocupaciones.

OREMOS:

Para confiar en Dios.

 Pedro: el sediento de Dios