Arte en la oscuridad

EL APOSENTO ALTO

Miércoles, 13 de octubre de 2010
Arte en la oscuridad

Léase el Salmo 57

Listo está mi corazón, Dios, mi corazón está dispuesto; cantaré y entonaré salmos.

-Salmo 57.7 (RVR)

LA mañana después del funeral de papá, al regresar a casa, me hallé hundida en el sufrimiento durante mi tiempo de oración. Reviviendo los muchos actos de bondad demostrados a nuestra familia, repentinamente quise tener algo mejor que una tarjeta para expresar mi agradecimiento al pastor de mis padres y a unos vecinos maravillosos.

Decidí hacer regalos hechos a mano. Mientras hacía los regalos, descubrí que estaba inmersa en una creatividad meditativa. Mi estado de ánimo mejoró, y cuando llevé mis obsequios a la oficina postal, me sentí profundamente consolada.

Ahora recuerdo esta experiencia cada vez que leo el Salmo 57, escrito mientras el autor estaba escondido en una cueva, temiendo por su vida. David, el pastor, el guerrero, el rey, fue también el poeta y el músico. Sin duda, su alabanza en la cueva oscura le proveyó paz y seguridad, y ahora hace lo mismo por nosotros/as. También nos recuerda que poseemos habilidades creativas diversas que podemos consagrar a Dios y utilizar para el bien de otras personas. Cuando empleamos esas destrezas, podemos hallarnos maravillosamente reanimados.

Sa. Deanna Overstreet (Nuevo México, EUA)

Oración:

Oh Señor, ayúdame a utilizar mis dones para bendecir a otras personas, aún en medio de mi dolor. Amén.

PENSAMIENTO PARA EL DÍA El servir a otras personas brinda luz en los días oscuros.

OREMOS:

Por los músicos.