Contar nuestros dìas

EL APOSENTO ALTO

Sábado, 22 de enero de 2011
Contar nuestros días

Léase el Salmo 63.1-8

Enséñanos a contar bien nuestros días, para que nuestro corazón adquiera sabiduría.

-Salmo 90.12 (NVI)

ESTA visita de mis padres fue inolvidable. A los diez minutos de la visita, papá encontró una excusa para que él y yo fuéramos a la tienda. Mientras papá me contaba que algo andaba mal con mamá, mi madre le contaba a mi esposa cómo papá había colocado un código secreto en el teléfono que le impedía a ella utilizarlo. Poco después, a mamá le diagnosticaron Alzheimer. Falleció unos años más tarde en un asilo.

Su muerte me hizo reflexionar en la fragilidad de la vida. Claro está, yo no soy el primero en hacerlo. El salmista sabía esto y oró hace muchos siglos: «Enséñanos a contar bien nuestros días». La mayoría de nosotros/as ignoramos el hecho de que nuestros días son contados. El sol sale, nos levantamos, vamos al trabajo. El sol se pone, nos acostamos, nos levantamos para comenzar el ciclo nuevamente. Esa es la vida. Pero algunas personas no se levantarán mañana.

Aunque podamos contar nuestros días con fiestas de cumpleaños y de Año Nuevo, también los podemos contar al medir nuestra comunión con Dios. He decidido conocer a Dios más íntimamente. Quiero adquirir sabiduría.

Sr. Thomas Buice (Florida, EUA)

Oración:

Amado Señor, recuerdame que mi tiempo aquí es limitado y que el agradarte debe ser mi labor principal. Amén.

PENSAMIENTO PARA EL DÍA ¿Cómo mido la calidad de mi vida?

OREMOS:

Por los pacientes de Alzheimer y quienes los cuidan.

 Pedro: el sediento de Dios