viernes, 10 de diciembre de 2010

Iliminar mi camino

EL APOSENTO ALTO

Viernes, 10 de diciembre de 2010
Iluminar el camino

Léase Romanos 8.38-39

Tu palabra es una lámpara a mis pies y una luz en mi camino.
-Salmo 119.105 (VPEE)

A las 4.45 salí de la casa para realizar mi carrera matutina. Vivo en el campo y las fuentes de luz para mis carreras tempranas son la luna, las estrellas y las luces de los patios de los agricultores. Esperaba correr bajo la luz de una luna llena, pero las nubes ocultaban la luz. El tratar de moverme en la oscuridad me dejó con un doble desafío de ver dónde estaba corriendo, y de dejarle saber a los conductores que estaba allí.

Al final de mi carrera, una interrupción en las nubes me permitió ver la luna. No sólo hizo del cielo una hermosa obra de luz y oscuridad, sino que me dirigió en el camino.

Cuando nos encontramos moviéndonos en la oscuridad, a menudo nos sentimos atrapados, perdidos, temerosos, ansiosos y solos. No sabemos dónde estamos y no podemos llegar a donde queremos ir. Necesitamos una luz que nos guíe.

La gloriosa luz de la luna esa madrugada me recordó que no estamos solos. En todas las circunstancias, Dios camina con nosotros/as en amor, cuidado y preocupación. Aun cuando la oscuridad en nuestras vidas nos hace sentir perdidos o desorientados, Dios nos provee luz para guiarnos a casa.

Sr. Cole Warner (Wisconsin, EUA)

Oración:

Amado Dios, ayúdanos a entender que en los tiempos de oscuridad tú estás con nosotros/as guiándonos. Amén.
PENSAMIENTO PARA EL DÍA

La palabra de Dios es luz en nuestra oscuridad.


OREMOS:

Por los trabajadores en los turnos nocturnos.


 Pedro: el sediento de Dios



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