Sin atajos

EL APOSENTO ALTO

Domingo, 28 de marzo de 2010 Sin atajos

Léase 2ª a los Corintios 15.15-37

Dondequiera que vamos, llevamos siempre en el cuerpo la muerte de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestros cuerpos.

-– 2ª a los Corintios 4.10 (RVR)

EL Domingo de Ramos ha llegado. Lo he esperado toda la cuaresma, pero no quiero escuchar los relatos sobre el juicio, la multitud gritando «¡Crucifícale!», Jesús caminando hacia su muerte. Este año me gustaría pasar por alto los relatos de la traición y el dolor, e ir directamente a la resurrección.

Pero lo que un naturalista en Alaska me dijo explica por qué el proceso no es así. El viento, los pájaros y el agua depositan semillas y nutrientes en las rocas glaciales. En los huecos de la roca se acumulan las semillas y comienza a nutrirse vida nueva. La vida pequeña viene primero, después la vida mediana y finalmente los árboles. Pero si éstos germinan muy temprano, carecen de lo que se necesita para sobrevivir, y mueren.

Así como las rocas reciben nueva vida, tenemos que absorber lo que la Semana Santa nos puede enseñar. Si vamos directamente a la Resurrección, quizás no seríamos el terreno que sostiene nueva vida. Me gustaría encontrar un atajo hacia la Resurrección, pero no lo hay. Escuchemos los relatos otra vez, y estemos dispuestos/as al crecimiento que puedan brindar.

Sa. Debra K. Farrington (Pensilvania, EUA)

Oración:

Dios del camino, ayúdame a absorber la nutrición en los tiempos difíciles, para continuar creciendo en ti. Amén.

PENSAMIENTO PARA EL DÍA ¿Qué relato de la Semana Santa me desafía más?

OREMOS:

Para ver los pequeños comienzos en mi vida.

 

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