EL APOSENTO ALTO
Viernes, 17 de septiembre de 2010
Si alguno de ustedes quiere construir una torre, ¿acaso no se sienta primero a calcular los gastos, para ver si tiene con qué terminarla? De otra manera, si pone los cimientos y después no puede terminarla, todos los que lo vean comenzarán a burlarse de él, diciendo: «Este hombre empezó a construir, pero no pudo terminar.» ¿Jardín o jardinero?
Léase Mateo 7.24-27
-Lucas 14.2830 (VPEE)ADORO cultivar flores hermosas y coloridas. Muchas personas han admirado mi jardín y me han pedido que les ayude a sembrar el suyo. Pero lo que he descubierto es que la mayoría de la personas realmente quieren un jardinero. Después que han sembrado las flores y han realizado la tarea ardua de desyerbar, regar y podar, muchas de estas personas abandonan su jardín. Al abandonarlo, no progresa. El tener un jardín hermoso y lleno de vitalidad requiere trabajo y dedicación.
Veo un patrón semejante en mi vida. Deseo tener una relación íntima con Dios y con la belleza que esa relación brinda. Pero cuando el trabajo arduo de la obediencia comienza, tiendo a ser holgazana o me siento agotada. Para tener una relación saludable con Dios, debo ser diligente al cumplir con el trabajo de cuidar esa relación.
Sra. Debra K. Johnson (Ohio, EUA)
Oración:
Amado Dios, ayúdanos a desear hacer la obra que una relación contigo requiere, de manera que crezcamos en obediencia a tu palabra. Amén.
PENSAMIENTO PARA EL DÍA
¿Cómo estoy cuidando mi relación con Dios?
OREMOS:
Por los hortelanos.
viernes, 17 de septiembre de 2010
¿ Jardín o jardinero?
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